Eres el
huracán que todo lo arrasa,
la
tormenta que deja a cualquiera desnudo,
Eres la brisa
que acaricia el alma,
como la garúa
que el rostro suaviza,
o el bálsamo que
alivia la carne a las brasas.
Y cuando todo
pasa,
regresa el
fuego de nuevo,
al final,
solo quedaron
cenizas mojadas.
Managua, 12 de Febrero 2019