Crítica Literaria

jueves, 26 de noviembre de 2015

CÁNTICO CARTUJANO





CÁNTICO CARTUJANO

I

La eternidad no tiene prisa,
solo prosa.
Se jodieron los banqueros,
tan poco les debo a los miserables,
que sus gusanos creen que soy
su esclavo.
Mañana amaneceré muerto amor mío.
¡Si les debo, págales!
de centavo en centavo,
así se gozan ellos.
Cántame una misa Gregoriana,
a la Loliana, o a la Cartujana,
pero que sea en mi santuario,
con cantos que rompan silencios,
silencios de ángeles tristes,
a los demonios les gustan las bo-rancheras.

II

Los diablos vivos me harán custodia
en misa disputarán mi mortaja
a suerte echarán mis poemas,
cara o cruz,
que la primadona lea lo que quiera,
¡A mi déjenme descansar en paz!
Llegaré al Hades uno de éstos días,
cantando con larga túnica, salterio y arpa,
mis versos.
Mientras respire,
seguiré cantando cantares,
de mis ángeles y mis demonios.
Mi primo se hartó de vivir,
se pegó un balazo en la boca,
descanse en paz.

III

¡Religiosos! ¡Divídanse!
¡Políticos! ¡Conspiren crímenes!
¡Banqueros! ¡Fabriquen suicidios!
¡Apocalipsis, acaba tu misión!
¡Nada podrán robarse cuando se pudran!

¡Yo no peleo con nadie!
Yo solo quiero ganarme tu corazón,
-Amor mío-!
Perdámonos juntos en paraíso.
Misericordia quiero,
sacrificio ya tuve suficiente.

Managua, 2 de Noviembre 2015